Tu eres un cohete, yo sólo un globo...

Un cohete posee un mecanismo propulsante que le imprime un empuje, lo lanza para vencer la fuerza de la gravedad terrestre. En cambio, el globo cuenta con un sistema infinítamente más sutil, no existe en él mecanismo de propulsión. Sólo un fluido encerrado en una burbuja de polietileno, tratando de encontrar su equilibrio dentro de otro fluido: la atmósfera. Un juego de fuerzas y densidades que sólo da comienzo una vez el globo es despojado de sus ataduras a tierra,es decir cuando es liberado.

Ahora sé que era imposible intentar alcanzarte. Siempre volarás más rápido y más alto que yo. Sólo soy un globo que ansiaba encontrar mi equilibrio dentro tuyo. Tú, desde el principio te sabías cohete.

Quizá por eso, por conocer de antemano mi desventaja me permito un reproche:

Antes de despegar, cuando habitábamos en la misma atmósfera, cuando no necesitábamos que otros planetas nos descubrieran, deberías haberme avisado del enorme riesgo que corría por querer viajar contigo, de tu mano. Deberías haberme dicho que aunque sin querer, podías quemarme, abrasarme, como finalmente pasó. Subiste tan rápido que apenas me dio tiempo a despedirme, bajé tan rápido que me hice daño. Creo que no podré volver a volar...No importa, he decidido esperarte aquí, algún día tendrás que aterrizar y yo me manejo mejor en las distancias cortas.

Además, aunque pudiera ir en tu búsqueda, desde entonces tengo vértigo..